La conservación del patrimonio natural y cultural de un país es de suma importancia; ya que al ser bienes únicos e irremplazables, su pérdida representaría el empobrecimiento de una herencia invaluable, excepcional e histórica para la humanidad y las futuras generaciones, expresó la diputada Bárbara Romo Fonseca.
En este sentido, la legisladora afirmó que la reforma recién aprobada en la Cámara de Diputados, busca establecer entre las atribuciones de la Secretaría de Turismo, la obligación de promover la conservación de los bienes denominados de riqueza natural y cultural en el desarrollo de la actividad turística.
Subrayó que con 32 sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial, “existe una responsabilidad mayor por mantener su cuidado y protección a partir de un trabajo colaborativo con gobiernos estatales y locales, así como con la participación de los sectores social y privado, a fin de evitar daños irreversibles o la pérdida de atractivos naturales únicos”.
Y es que dijo, debido a la gran capacidad de nuestros recursos para atraer turistas, actividad que dejó apenas el año pasado una derrama económica de 16 mil millones de dólares, es preciso difundir la importancia de respetar los bienes representativos de la historia, la cultura y la belleza natural de nuestro país.
Destacó que sería atroz que en un futuro, no se pueda disfrutar de las Barrancas del Muerto en el estado de Chihuahua, Las Cascadas de Agua Azul en Chiapas, de la Peña de Bernal en el centro del país o de Chichen Itzá en Yucatán, por mencionar solo algunos.
Por ello, Romo Fonseca puntualizó que con esta propuesta impulsada por el Partido Verde se apuesta no sólo por la promoción del equipamiento e infraestructura del patrimonio natural y cultural sino también por un desarrollo sustentable como parte del proceso de conservación continuo de estos atractivos turísticos.
Finalmente, la integrante de la Comisión de Turismo aseveró que se vive una realidad de deterioro ambiental, a la cual, “debe responderse con la priorización de los instrumentos, mecanismos y normatividad que legislen para soslayar este fenómeno, sobre la propia actividad comercial, industrial o turística de un país”; y agregó, “nuestra responsabilidad es vigilar nuestro patrimonio no sólo como fuente de crecimiento económico sino como parte de la herencia del los mexicanos y el resto de la humanidad”.
PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO
